Si tomás una bebida dulce, luego degustás una cucharada de dulce de leche y luego volvés a tomar un sorbo de aquella bebida dulce, este úlitmo sorbo te va a parecer más amargo que el primero.
Lo mismo sucede con la vida: si te ocurrieran constantemente cosas muy buenas, no podrías apreciar las cosas simplemente buenas de la vida.
3 comentarios:
Es asi!! muy bueno che!
sos un groso, andyyyyy!!!
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